Siempre he defendido, aun a riesgo de ser condenado al ostracismo cultural, que la gastronomía merece sobradamente un lugar entre las grandes expresiones del arte; si el cine se ganó, a raíz del Manifiesto de las siete artes (1911) de Riciotto Canudo, el título de “séptimo arte”, la gastronomía encierra...